Memoria Flash con un átomo de espesor podría llevar a chips flexibles

Los científicos de la Ecole Polytechnique Fédérale de Lausanne, Suiza, crearon una unidad de memoria flash de molibdenita y grafeno. La investigación es un paso más en la creación de circuitos electrónicos basados ​​en sustancias que sustituyen al silicio, lo que permite una mayor eficiencia energética y lograr un mejor rendimiento.

El mismo grupo de investigadores ha participado el año pasado en la producción del primer chip construido con molibdenita. En este experimento, la preocupación era crear transistores funcionales y componentes electrónicos sin el uso de silicio, que fueron capaces de procesar datos. En el foco de la investigación actual está la creación de chips de memoria, tales como los presentes en la célula o un SSD.

La molibdenita (MoS2) es una sustancia con propiedades interesantes, que la convierten en una de las grandes opciones al silicio para el futuro de la informática. Sus características estructurales le permiten crear transistores, la base de cualquier chip, que consume muy poca energía. Combinado con el material de grafeno que es más conductor, se pueden crear circuitos con el espesor medido por los átomos.
En el caso del modelo de prueba en Suiza, los científicos utilizados como el sustrato de molibdenita mediante la sustitución de silicio. Haciendo basado en papel, sustancia permite que las transiciones de estado muy rápido con bajas cantidades de energía.

Ya el grafeno se utilizó como electrodo y como una interfaz: molibdenita como los transistores estando en transición, ya sea escribiendo o borrando datos, el grafeno almacena la posición de cada uno de ellos, asegurando que la información no se pierde. Como tiene una alta conductividad, la velocidad de proceso es exponencialmente mayor que el potencial para las memorias flash basadas en diseños tradicionales. Junto con baja demanda de energía de molibdenita, viene un componente electrónico con el potencial de ser mejor que un silicio equivalente en todos los aspectos.

Otro punto interesante de la investigación es la percepción que los chips de cualquier tipo, creados a partir de la molibdenita y grafeno puede ser la solución para la electrónica flexible, es decir, que se puede plegar. Los dos compuestos pueden ser moldeados y se aplican sobre un diseño del microchip con capas que tienen un espesor medido por átomos y no nanómetros.